Muy interesante aportación en el Blog del Querido hermano Victor Guerra


 S
OMOS LO QUE COMEMOS, ¿“N´est-ce-pas?






Hermanos, el título de mi exposición fue elegido para estimular vuestras papilas gustativas. En mi experiencia, los francmasones de Inglaterra siempre están interesados en la comida, que como el clima, siempre es variable. 
Uno queda agradablemente sorprendido cuando es buena, pero cuando es bastante pobre, los asuntos del clima o de la comida sobre la mesa, permiten una buena queja y un tema para la conmiseración mutua.   Las dos me parece que forman la base de las típicas actitudes filosóficas inglesas. 
¿Actitudes filosóficas?..... ¿las tenemos?!    Puede aún alegrarse, poco amablemente, que tales quejas con frecuencia se suman! 
En Inglaterra, comemos, y mucho. Y por supuesto e eso nos da nuestro particular sentido del humor!
La segunda parte de mi título, “n’est-ce pas”, fue escogida con un ojo puesto en la bienvenida y recepción de nuestro distinguido visitante de Francia, el Dr. Roger Dachez. 
.“N’est-ce pas” es un interrogativo maravilloso en francés, que jamás se declina y es invariable.
Es como decir “isn´t it” (que es lo que significa . “n’est-ce pas”) 
Nota del T. Quiere decir .. ¿No es así?, o ¿es así, no? 
Y es usado en todas las situaciones en Inglaterra, donde  decimos : ¿No piensa usted que..? o no son ellos..?
Nosotros personalizamos la pregunta: el francés la impersonaliza. 
N’est-ce pas”, que puede ser considerada meramente como una expresión pasajera, sin embargo puede ayudar a representarse en un microcosmos del foco intelectual de la cultura francesa. 
Estoy seguro que hallarán ustedes en Roger Dachez un verdadero pensador, la encarnación viva de la diferencia estimulante que estoy tratando de expresar. 
En muchas logias francesas y de hecho por todo el continente, usualmente los hermanos suelen mantener  discusiones –no políticas, sino filosóficas; hay un intercambio regularmente construido en pensar, investigar y compartir. 
Pero cuando elegí mi título, no estaba al tanto del tema principal que se daba en esta Conferencia de Cornerstone, que era “Las Bellezas de la Verdadera Santidad”.   Quedé maravillado de que me hubieran invitado a hablar. Por supuesto me sentí halagado pero si me hubieran dicho antes el tema que debía dirigirles, hubiera quedado sorprendido y aún, horrorizado. 
Me siento un poco como esos panelistas de radio que son invitados a hablar sin desviarse por unos 60 segundos en algún tema acerca del cual no tienen conocimiento alguno para que la audiencia pueda esbozar una sonrisa.  La diferencia en este caso es que yo estaré hablando  cerca  de 60 minutos y se sentirán afortunados si pueden asomar una sonrisa en algún momento! 
No me maravilla que Julian Rees, cuando escuchó mi titulo propuesto para esta charla  “ Somos lo que comemos, no?”, le disparó a Mark Qualter: “está bromeando, es una metida de pata”!
Bien, debo admitir que hay algunas discrepancias entre “Las bellezas de la Verdadera Santidad” y “Somos lo que comemos, no?”pero me gusta un poco el desafío sino no estaría aquí.  Comenzaré por decir que la francmasonería inglesa da una importancia considerable a la comida. Y no me basaré en eso. Mis pocas palabras en ese asunto intentaban ser de la naturaleza de un “hors d´oeuvres”. (entremés) 
El plato principal, el “plat du jour” es el que sigue: En Inglaterra damos por hecho que después de cada reunión de Logia o Capítulo usualmente nos sentemos para una comida formal.  Ocasionalmente puede ser un buffet. Pero de una u otra manera, todos los hermanos tienen la oportunidad de tener una comida variada y sustancial con facilidad, tan natural como respirar.  Esto es “convivir” o sea “vivir juntos”, como denota el término en latin, convivium. 
Nada malo hay en esto, por el contrario. 
Pero la forma inglesa no es de ninguna manera universal. Simplemente con cruzar la frontera con Escocia, se experimentará, como estoy seguro que habéis sentido, una actitud distinta hacia la cena. Allí, excepto en las reuniones de Instalación, el consumo de alimentos es mucho más simple e informal. No hay falta de convivencia, sino que toma una forma diferente.   De la misma forma, puedo decirlo, los procedimientos en los Estados Unidos de América son breves y livianos. 
Sin duda que Roger [Dachez]podrá decirnos en su momento, cuál es la forma usual en Francia. 
He visto lo que sucede en Dinamarca, que tiene una práctica similar a la inglesa, en otras palabras, un buen asiento y mucho entrechocar de copas, pero aunque en conjunto ordenado y preciso, también a veces es fastidioso.  Nadie en Dinamarca puede comer más de un alimento en un plato como hacemos aquí, cada porción de comida cuidadosamente presentada y decorada se toma selectivamente en un plato individual, comiendo con estilo, por separado y a su turno. 
Durante ese trabajo, los hermanos de Dinamarca están vestidos muy formalmente con corbatas blancas, y con los collarines de su rango, en tanto que otros discretamente llevan joyas en miniatura. Es claramente la atmósfera de un casino de oficiales.Por supuesto que aparte de la corrección en la vestimenta y las formalidades de los brindis, no hay nada particularmente especial en la reunión danesa, y en cuanto a la comida, el estilo de su preparación y orden en el servicio, es tan natural como respirar. 
Lo interesante sin duda es que estas formas sean tan distintas en cada país. ¿Por qué es así?. 
¿Porqué los francmasones ingleses deben esperar a que se sirvan tres o cuatro platos, mientras que los escoceses se satisfacen con una tarta y una pinta? o mebbee a bevvy and a wee dram or twa? De cuestiones tan sencillas pero profundas, suele decirse en broma que “la respuesta descansa en el suelo”. Y de hecho es así. 
Descansa en el suelo de la geografía y la historia y en la cultura nacional que ha producido. Y, como con la comida, así pasa con la francmasonería. En términos de esta charla, “estamos tomando los crudos”, la simple raíz del primer plato, como anticipo del plato principal, el “plat du jour”. 
En francmasonería hemos comenzado en todos los países con los mismos ingredientes, muy similares, casi idénticos. Los básicos parecen haber sido proporcionados primeramente por Gran Bretaña. Puede argumentarse el caso de su comienzo en Escocia, para 1599, como el profesor David Stevenson ha hecho muy hábilmente, o por su intensificación indudable y popularización siguiendo a los sucesos de la así llamada “Primer” Gran Logia en Londres para 1717, o aun apuntando al ímpetu irlandés que enriqueció nuestros rituales y esparció la francmasonería por el globo. Este no es el lugar para sopesar las contribuciones respectivas de tales ingredientes: la clave es que los principios, los ingredientes son los mismos en cada caso. En efecto, reflejan y mucho la adhesión a la autoridad y código de conducta de los Old Charges del oficio de masones, conocido desde los tiempos medievales. 
Quiero salir de la historia y hablar del día de hoy, pero nuestra apreciación de una pequeña historia y geografía es inseparable de mi tema central (que es lo que nos hace lo que somos y eventualmente, cuando alcanzamos el plato de postre, cómo lo relacionamos con los conceptos de Verdadera Santidad) 
Desde Inglaterra, o Escocia, o  enambas, los franceses tomaron los ingredientes de su francmasonería. Pienso que Roger[Dachez]coincidirá en que se entusiasmaron, tanto como para agregar o quitar un poco de condimento, tomaron otros ingredientes nativos y lo cocinaron todo junto en exóticos platos de vez en cuando.De ningún modo esto es peyorativo. Se encontraron con la masonería y rápidamente la adaptaron a sus circunstancias, necesidades y gustos. Desde el segundo cuarto del siglo 18 hasta la revolución de 1789, la francmasonería francesa estuvo plena de entusiasmo y exploración, a veces relacionada a problemas sociales, a veces a contemplaciones de reformas sociales. 
La Francmasonería proveyó uno de los pocos medios, bajo la monarquía francesa, de compartir las aspiraciones hacia un mejor futuro y posteriormente ponerla en practica al establecer una logia.  Asi como la comida francesa es regional, así lo son sus varias francmasonerías. 
Después de la Revolución y sus interrupciones, y las victorias ganadas por las armas contra las fuerzas reaccionarias, la nación francesa pudo eventualmente hallar una causa común en “Libertad, Igualdad y Fraternidad”, que coincidía muy bien con los ideales masónicos seculares. La presencia continua y “reaccionaria” fue la Iglesia católica romana. 
La educación probó ser una batalla clave para los reformadores sociales franceses, incluyendo a los francmasones, enfrentados con la Iglesia en un esfuerzo de abrir un acceso, eventualmente para todos, libre de miedo y prejuicio, manipulación y adoctrinamiento. En nombre de la Libertad e Igualdad fueron cambiadas toda suerte de antiguas tradiciones, incluyendo el rol de las mujeres. ¿Porqué las mujeres debían estar como adoptadas y por lo tanto sometidas? Fue natural que tuviesen un sitio en el mundo masónico. 
Durante la Segunda Guerra mundial, muchos francmasones franceses, como también de países ocupados, fueron sistemáticamente exterminados por los nazis y sus aliados totalitarios. Los posters con las camisas negras y botas fascistas que vemos ocasionalmente no eran meros ornamentos- retrataban la realidad!  Fue una realidad para millones de personas que aún están vivas! 
De este breve relato puede apreciarse que la francmasonería francesa, como ejemplo prominente, halló en si misma, por virtud de sus propios ingredientes principales y su medio geográfico y cultural, un impulso para defender las libertades y extenderlas. Es en consecuencia que el Presidente de Francia hace algunas de sus consultas a través de la francmasonería ( como así de otros medios) y sus líderes, de tiempo en tiempo han sido bienvenidos en el palacio del Eliseo. 
No necesito hablarles de un trasfondo equivalente para Inglaterra. Hemos tenido una existencia comparativamente fácil.
Los malestares sociales se han mantenido en una relativa paciencia y gradualmente ajustados. Siempre hemos tenido libertad de expresar nuestro descontento a los jefes de gobierno y en formular una conciencia social que, de vez en cuando, eventualmente empujo a consensos democráticos. Nacionalmente jamás sufrimos trabas autoritarias (masónicamente, sin embargo ha habido ciertos periodos en Inglaterra, pero es todo un tema aparte)
En otras palabras, que en Inglaterra debemos darnos por felices de vivir en condiciones relativamente benignas. Hemos sido capaces de introducir uno de los ingredientes claves de Anderson dentro de la francmasonería británica: “Un masón es un sujeto pacifico”, jamás involucrado en complots y conspiraciones contra la paz y bienestar de la nación y feliz de respetar toda autoridad constituida..
Esa ha sido en forma continua la base de nuestro Segundo Cargo. Otro ingrediente clave es la reformulación en 1723, que fue su primer Cargo:
“ Un masón esta obligado por su compromiso a obedecer la ley moral y si comprende rectamente el Arte, jamás será un estúpido ateo ni un libertino irreligioso”.
A menos que ustedes lo deseen, no examinaré ahora las implicaciones contenidas en esa famosa declaración; es suficiente decir que la opinión oficial británica sobre el tema esta en desacuerdo con la interpretación impuesta por muchos francmasones de Francia y en el resto del continente. La última versión de este primer Cargo en Inglaterra dice:  Dejemos que un hombre tenga la religión o modo de adoración que pueda y no será excluido de la Orden siempre que crea en el Glorioso Arquitecto del Cielo y la Tierra y practique los sagrados deberes de la moralidad.
Eso lleva a declarar de modo significativo que:  Los masones se unen a los virtuosos de todas las persuasiones con el firme y placentero lazo de amor fraternal, viendo lo errores de la humanidad con compasión y esforzándose por la pureza de su propia conducta en demostrar la excelencia de la fe que profesan.
En Inglaterra particularmente, bajo una religión reformada, la democracia parlamentaria, estabilidad económico, aislamiento geográfico y músculo militar cuando se necesitó (todo confirmado por la pacifica Revolución Gloriosa de 1688-89) hemos sido capaces de mantener tanto el respeto por la ley como un apego automático a esos antiguos principios. No hubo necesidad de cambiarlos.
Trabajamos confortablemente, vamos a excavar silenciosamente en nuestros jardines, conduciendo nuestros automóviles, yendo a la iglesia o jugando al golf, comiendo nuestros menús georgianos de cuatro platos y brindando por la Reina. Nuestra masonería refleja la solidez de esa tradición y seremos siempre capaces de afrontar una cena respetable: carnes y dos verduras al menos. Pero eso no ha sido igual cruzando a Europa continental.
Allí se ha sufrido hambre y represión. Las condiciones han sido con frecuencia muy crudas. . Sus francmasonerías en esos países tuvieron que elegir: pensar y luchar y se moldearon en esa pelea.  No debe sorprender entonces que en tales circunstancias tales principios y estructuras masónicas de tiempo en tiempo hayan sido convocadas a jugar un papel en las batallas por la liberación social, por la democracia, por la abolición de la pena de muerte.
Gracias Dios que nosotros en Inglaterra ( desde los normandos!) no hemos tenido que soportar la tiranía!
Un ingrediente especial fue adicionado en los 1730s a la masonería que pasó desde Inglaterra a Francia. Y condimentó a la masonería continental desde entonces.
Me parece la esencia de nuestra diferencia esta contenida en esto: Lo que se conoce como el “Discours de Ramsay” para nosotros Discurso de Ramsay, que pretende ser una visión general de lo que es la francmasonería. Fue encuadrado en términos atractivos para los gentilhombres de Francia: clásicos, artísticos y patrióticos.
Afirmó su visión: Los hombres no se distinguen esencialmente por la lengua que hablan, las costumbres que tienen, los países donde residen o las dignidades que portan.  El mundo entero es solo una Gran Republica, donde cada nación es un miembro de la familia y cada individuo un hijo.
Nuestra Sociedad se estableció para re-establecer y extender esas antiguas máximas tomadas del rumor de la naturaleza: sabia filantropía, moralidad pura y sentido artístico. Deseamos unir a los hombres de mente iluminada y actitudes correctas, no solo por el amor al elevado arte, sino aun mas por los grandes principios de virtud, donde el interés de la fraternidad sea por toda la raza humana, donde todas las naciones puedan desarrollarse sobre bases sólidas y donde todos las personas de diferentes naciones puedan reunirse sin celos, viviendo sin discordia y amándose uno al otro sin dejar de hacerlo a su pais nativo… el único objeto es la reunión de mentes y corazones, para hacerlos mejores y formar a su debido curso una nación espiritual donde, sin abandonar los deberes que la diferencia de estados exige, un nuevo pueblo aparezca entre las naciones, cimentando todo con los lazos extendidos de la virtud y la ciencia.
Pero esta visión así grandiosamente expresada, y mezclada convenientemente a un pasado mítico desde los caballeros cruzados, jamás podría haber sido enunciada en Inglaterra.  Proviene en efecto de un jacobitas nacido escocés, con anhelos de enamorado romántico al estilo francés, hijo de un carnicero ennoblecido como caballero. ¿Es injusto comparar su grandilocuencia a la retórica que apoya la Unión Europea?
En Inglaterra la francmasonería es personal. Debe ser absorbida por el individuo. Hace mejores hombres, como individuos. No busca el cambio social excepto por promover las virtudes del amor fraternal y la caridad. En Inglaterra, la francmasonería es esencialmente humilde y tal humildad se deriva del reconocimiento de la grandiosidad Divina.
Esa es la comida de la cual nos alimentamos. Y estamos conformes con ella. Estamos cómodos allí dentro.
Dicho esto, naturalmente debemos ir a los postres de este discurso y al tema de la Conferencia Cornerstone: Las Bellezas de la Verdadera Santidad. En dónde está esa belleza de la verdadera santidad?
¿Puede alguien que halla que es imposible aceptar la existencia de un Ser Supremo, Gran Arquitecto, Gran Geómetra, El mas Alto, el Omnisciente, Omnipresente y Omnipotente Juez de Todo, con un nombre sagrado y misterioso, decir que muestra las bellezas de la verdadera Santidad? En que medida son las bellezas de la verdadera santidad identificables en algún caso con los principios de la francmasonería?.
Si lo que practicamos refleja: “ la religión en que todos los hombres están de acuerdo” ( para usar la famosa frase de Anderson), en que medida esta por debajo de esa verdadera santidad?.
La santidad no era, en aquellos días, por supuesto, propiedad exclusiva de las cristiandad. Todas son cosas a ponderar, el postre es rico. Una porción de natillas, “creme anglaise” , ha sido vertida sobre él. Lo que puede decirse acerca de la francmasonería inglesa( me he refrenado de decir anglosajona) es que ha sido moldeada desde el TLS.
Esta muy relacionada a la tradición bíblica, con adiciones, admitámoslo, de alguna mitología esotérica complementaria. Se basa en las Escrituras, aun si las revelaciones específicamente cristianas han sido desplazadas. En tal sentido es reconociblemente mas fiel a su pasado medieval a pesar de los cambios y adiciones, que a lo simplemente tomado del humanismo.
Es también mas fiel en términos prácticos: no hacer nada que traiga discordia a la logia y cause el descredito del Arte. En ese sentido la francmasonería inglesa es pietista y deliberadamente apolítica. Se concentra en la caridad. Tales posiciones, me parece que son buenas para propiciar la profundización de la Santidad.
Pero también conllevan ciertos defectos. Se tolera la pasividad y se anima la autosatisfacción. Todo ello conduce con facilidad a caer en la esterilidad y la insularidad- la falta de interés y empatía por los demás.
Con todos esos defectos, la francmasonería inglesa, como movimiento, jamás podrá decir que muestra las bellezas de la verdadera santidad.
No- hasta que se abran los ojos apara ver mas allá de nuestro propio horizonte, hasta que eliminemos nuestra propia ignorancia- ignore- ance- de otras formas de francmasonería, hasta que seamos capaces de comprender y respetar la sinceridad de distintas formas de francmasonería, hasta, mas especialmente, que lleguemos a vivir mas apasionadamente en comprensión, expresando y actuando sobre nosotros, no llegaremos a apreciar las bellezas de la verdadera santidad como Oficio o como individuos.
Como dijo un pagano, “ Conócete a Ti mismo”, y un humilde carpintero resumiendo su viaje por esta vida: “saca la viga de tu propio ojo…” Siempre me ha gustado tener algo amargo para después de la cena,¿a ustedes no?
¡Lo hallo bueno para la digestión!
The Cornerstone Society Northern Conference, Salford Greater Manchester . 0th November 2007
John Acaster © Past Master of Manchester Lodge for Masonic Research
Aportación y traducción de Saul Apolinaire   para  Blog Rito Francés

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